Desde hace mucho que tenía ganas de volver a escribir, pero no encontraba la inspiración, pues muchas preocupaciones me rondaban en la mente, pensé escribir sobre mi graduación pero luego de ella llegaron más presiones y no me di el tiempo, y como ya paso, ya se fueron las ganas de redactar sobre ese tema, lo único que me nace en estos momentos es poder decir que pese a todo me siento contenta, en paz, como si mi alma se hubiera dado un baño de esperanza y alegría, no puedo dejar la sonrisa dibujada en mi rostro, aunque haya esperando más de una hora que pase la movilidad en Santa Clara junto a cuatro tipos de dudosa procedencia y haber aumentado el resfriado que me torturaba toda la semana, y encima el cobrador me haya cerrado la ventana en la mano, sigo aquí contenta tecleando con el dedo hinchado pero alegre.
Pensaran que he bebido algo o he tomado alguna pastilla de esas que te alteran los nervios, pero no, no sé lo que es exactamente, pero sé que hoy dormiré y tendré un sueño divino…soñare contigo, porque solo me queda eso.
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